HALF MARATON MONTEVIDEO


SUPERSÓNICOS CORREN LA HALF MARATON MONTEVIDEO 21K

DOMINGO 1 DE AGOSTO
HORA: 10:00
LARGADA: Canteras del Parque Rodó


Plantel Sónico

Rossana Gonzalez
Gerardo Basignani
José Chiriff
Juan Da Rocha

APOYANDO A NUESTROS COMPAÑEROS


EN APOYO A NUESTROS COMPAÑEROS GERANDO BASIGNANI, GABRIEL BONILLA Y NELIDA LEAL QUE HAN PERDIDO FAMILIARES EN ESTE AÑO UN ABRAZO DE SOLIDARIDAD ESTANDO CON CADA UNO Y EN CADA CORAZÓN.

J. Alberti
EQUIPO SUPERSÓNICO

42K ROSARIO 2010

IX Maratón de Rosario

21 de Junio 2010, Rosario, Argentina

“Rosario siempre estuvo cerca” – dice Fito.

“La llegada de los 42k nunca estuvo cerca” – dijimos con Andreo cuando estábamos en la largada.

Salimos de Montevideo el sábado 29 de junio a la 1:00 de la madrugada desde la plaza de enfrente a Tres Cruces, en un ómnibus contratado por nuestro compañeros de Pasos del Sur, con quienes preparamos los 42k. Con Diego, Santiago y algunas veces Tato nos entrenamos.

Llegamos a Rosario a aproximadamente las 13:00 hs. del sábado, luego de una demora de 1 hora en Migraciones de Paysandú – Colón y otra hora de una parada en una estación de servicio para comer algo.

Fuimos directo a buscar los kits de la carrera (chip, remera, folleto técnico de la carrera), en un gimnasio muy lindo que además tenía la Expo Maratón con algunos stands de venta de indumentaria deportiva (a muy buen precio). Rápidamente obtuvimos nuestro kit, y registramos el chip en una base de datos que tenían para tal eso.

Ahí encontramos al ex Capi Alberti que viajó con la gente de Atletas del Sur. El tipo estaba con la cabeza como un freezer, aunque nos adelantó que solamente había entrenado en los 15 días previos a la carrera. Aclaro que nunca pensamos que estaba loco…

De allí fuimos a nuestro hotel (Hotel Majestic), que la verdad está muy bueno, y se encuentra a unas 4 o 5 cuadras del Monumento a la Bandera. Tomamos la habitación, desarmamos bolsos, navegamos por Internet, miramos tele, etc. El Titán y yo juntos, en la misma habitación, pero en camas separadas.

A la noche arrancamos en busca del tan recomendado pechito de cerdo. Ya en los entrenamientos en Montevideo se hablaba eso, porque algunos compañeros de Pasos del Sur ya tenían basta experiencia en las maratones de Rosario. En fin, comimos unos pechitos y matambritos de cerdo regados por un Cabernet Sauvignon Roble, cosecha 2004, de Trapiche. Sencillamente ES-PEC-TA-CU-LAR, una pena que tuviéramos que moderar la ingesta.

El domingo recorrimos distintos lugares típicos del centro de Rosario, fuimos a la casa donde vivió El Che, al bar El Cairo donde el Negro Fontanarrosa tomaba café en la Mesa de los Galanes con sus amigotes (que siguen frecuentando una mesa típica del bar frente a la barra). Fuimos a conocer el Monumento a la Bandera, próxima a la orilla del Río Paraná, frente al cual estaba instalado un escenario para conmemorar el Día de la Bandera y a cuyos actos asistió Kristinita (la presideeeentaaa).

La ciudad estaba vestida de celeste y blanco, llena de banderas argentinas y mucha gente, padres e hijos, con las camisetas argentinas. Porque la Maratón se hizo en el feriado del Día de la Bandera, en conmemoración al fallecimiento del Gral. Manuel Belgrano, creador de esa insignia patria.

Luego del partido entre Brasil y Costa de Marfil, preparamos los implementos para la carrera, los championes (zapatillas), las medias, el short, la calza, los gps, los geles, las remeras naranjas SUPERSÓNICAS, los chips, los alfileres, la vaselina (para correr). Todo bien ordenadito y junto, bien preparado para la carrera.

Tanto el almuerzo como la cena del domingo fueron bien planeados y cargados de carbohidratos. Unos sorrentinos al mediodía, con agua mineral, y dos platos de pastas a la noche (tallarines y ravioles). Adivinen quien no comió tallarines…, si, ni más ni menos que el Titán, porque dice que le parecen gusanos que se mueven. Y bueno, el tipo tiene unos problemitas sin resolver solamente para demostrar que es humano.

Alguien se pregunta si estábamos ansiosos o asustados? estábamos re-cagados, jajaja. No, la verdad que nada de eso, quizás con los nervios propios de un debut (quien no debutó en algo alguna vez en la vida?); porque teníamos confianza en que estábamos entrenados, y eso te prepara mentalmente para el desafío… ya voy a hacer algún comentario sobre la preparación mental más adelante.

Existieron los mensajes de aliento de las esposas y de los amigos, como Raúl, que no nos pudo acompañar pero estuvo muy preocupado por nosotros.

Nos acostamos pipones de pastas y nos levantamos el lunes a las 6:00 de la mañana, para el desayuno bien temprano porque la carrera comenzaba a las 9:00 y debíamos digerir lo que comiésemos. Desayunamos bien, café con leche, medialunas, pan con mermelada, jugo de naranja, el Titán se mandó un sándwich de jamón y queso, etc. Es decir, no faltaron carbohidratos ni proteínas.

Y a las 8:30 salimos en dirección a la largada, que estaba a 500 metros del hotel, frente al Monumento a la Bandera. Fuimos todos juntos éramos como 20 corredores, y algunos iban con sus esposas o novias.

Hicimos algunas entradas en calor, guiados por nuestros profes, fuimos a resolver nuestras necesidades fisiológicas, que además son necesidades psicológicas, porque uno quiere estar seguro que no habrá nada que incomode en las próximas horas.

Diez minutos antes nos dispusimos frente a la largada… la suerte estaba echada…, con el Titán nos confundimos en un fuerte abrazo, retroceder nunca, rendirse jamás. Nos saludamos, nos abrazamos, nos dábamos aliento, pero estábamos confiados en que podíamos. Mentalmente preparados para el desafío, y por sobre todo teníamos un plan de carrera, basado en mantener un paso firme, en hidratarse en cada uno de los puestos de hidratación ubicados cada 5 km y en clavarnos un gel cada 8 o 9 km, justo antes de un puesto de hidratación. Llevábamos además una pastilla de glucosa para el final que además de contribuir con la glucemia tiene un efecto placebo importante.

Largamos apenas pasadas las 9:00 hs., encendimos nuestros cronómetros al pasar por debajo del arco, el Titán salió adelante, y desde la largada solamente nos cruzamos una vez en la carrera y realmente venía muy bien ubicado.

El relato de los primeros 42k de Carlos

Largué con Arianna, la esposa de Diego, uno de nuestros entrenadores, porque tenemos el mismo ritmo, ya lo habíamos notado en el fondo de 30k del entrenamiento.

Al principio fue bastante difícil ajustar nuestro paso al previsto, porque hay mucha gente que sale a lo loco, como si fueran a correr 10k, y se cruzan, mientras que otros van charlando en grupos, a un ritmo menor al que tiene uno, por lo tanto cuesta mucho sobrepasarlos.

También están aquellos personajes que le dan colorido a la maratón, los que corren disfrazados, uno de payaso, otro de Flash, otro vestido de traje, con un bastón y championes (zapatillas), estaba lleno de competidores con camisetas argentinas.

Nuestro plan con Arianna era hacer un promedio de 5:30 min/Km, lo que resulta en 3h 52 min para los 42,195 km de carrera. Aunque Diego nos había dicho que podíamos hacer los primeros kilómetros a 5:27, para tener un colchón después del Km 30 de carrera.

Nos llevó 3 Km aproximadamente ubicarnos en un promedio de 5:27, y fuimos a ese ritmo hasta el Km 15 donde el promedio bajó a 5:26, incluso logré mantener ese ritmo hasta el Km 30 aproximadamente y la cuenta era fácil, 4 segundos por 30 Km da un colchón de 2 minutos para los últimos 12 Km.

Pero la gran incógnita era que iba a pasar desde el Km 30 para adelante, porque nuestro entrenamiento contenía un fondo de 30 Km como máximo. Los interrogantes eran: cómo reaccionará el cuerpo, nuestras piernas, el aire, las pulsaciones (las cuales me había preocupado en mantenerlas bien bajas. Y el MURO????, aparecerá? En qué Km?. Algunos te dicen que a los 32 o 33 Km y otros a los 35 Km.

Y ahora vuelvo a la estrategia mental, los kilómetros que me faltaban a partir de los 21k, los asemejaba a un desafío ya cumplido en el pasado. Por ejemplo, en el Km 21 pensé: “bueno, ahora tengo una media maratón por delante”, cuando estaba en el Km 28 pensaba: “faltan los mismos 14 km del fondo del otro día, entonces los puedo hacer”. En el Km 32 pensé: queda una carrera de 10k y encima la estoy haciendo a un ritmo mucho más bajo”.

Y a los 35 Km pensé: “el muro no aparece, vamos a ver que pasa en el Km 37”, y en el 37 dije: “si llegué hasta acá, no habrá nada en este mundo que me prive del placer de hacer 42 km, aunque tenga que llegar gateando”. En realidad dije otra cosa, que tiene más que ver con los órganos viriles masculinos, pero bueno, aquella frase tan relevante en aquel momento no se si tiene tanta importancia en este contexto.

Los 2 últimos kilómetros son maravillosos, porque la gente te alienta, y sentís la gloria, las piernas duelen, aunque sentís que volás, y cuando ves el arco de la llegada te falta el aire, que estuvo sobrado durante toda la carrera, pero ahora debe vencer el nudito que se forma en la garganta.

Y saben qué? El muro nunca apareció, y creo que eso tiene una explicación que no viene al caso; hasta aumenté el paso en los últimos 2k, porque mentalmente estás muy fuerte, y muy decidido a cruzar la meta.

Y ahí está uno, cruzando la meta, con los brazos en alto, porque hasta quedan fuerzas para eso, lleno de gloria, con el pecho inflado, no hay otros corredores, sos vos y la meta… y el nudito en la garganta.


El relato de los primeros 42k de Andreo


Y ahora esta mi relato, que les puedo decir que no les comento mi gran amigo Carlitos…Una locura que se convirtió en realidad, después de haber insinuado el año pasado y por razones ajenas no pudimos correrla ahora se dio ¡!!!!

Muchos nervios, pero muchos eh…. En mi caso no me pregunten porque pero estaba con la mente en blanco antes de largar, estaba enamorado de aquella ciudad con lo poquito que la conocimos me contagio el patriotismo argentino enserio se los digo, toda la ciudad embanderada, hermosa, la gente alegre con sus carabelas, remeras y banderas haciéndose notar y que lindo es eso…..

Como siempre pastas y más pastas mucho líquido y bastantes charlas técnicas con los compañeros para acortar las horas previas…hermoso grupo de gente y acompañantes que nos sentíamos como una familia con un fin en común, pasarla bien.

Vamos a la carrera….

Calentamos como siempre, hicimos unos ejercicios de estiramiento todos juntos y quien no quiere la cosa estábamos abajo del arco sin darnos cuenta prontos para largar…..
Un frío me corrió por la espalda y era de susto nomás…..

Nos saludamos con los otros compañeros y por ultimo un gran abrazo con mi gran compañero Bellomo, en ese instante se me pasaron unas cuantas carreras por la mente que corrimos y las mas importantes las debutamos juntos, y una vez mas enfrentándonos a otro debut…..

Partí medio lento dada la gente que corría que era mucha, como decía Carlos costo un poquito tomar el paso que nos habíamos propuesto en los entrenamientos, para variar se me fue un poquito el ritmo y apure como de costumbre mi paso, pensando que Diego me había dicho y recontradicho que me mantuviera en un paso constante y que después le cuento porque…..

Los primeros kilómetros hermosos por unas avenidas anchas, parques hermosísimos como mucho verde y aire fresco que en un principio era bastante frío y que después de los primeros 5 kilómetros ya era agradable.

Mantuve un paso constante pero medio rápido para lo que había pensado pero como me sentía bien e iba disfrutando y bastante cómodo, continúe con dicho paso, pasamos nuevamente por la largada a esa altura iban como 14 o 16 kilómetros, en esta etapa nos encontramos con un tubo humano y entre tanta gente encontramos algunos gritos de aliento por parte de los familiares de nuestros compañeros que fue una inyección de fuerza.

Luego de unos pocos metros de allí pasamos un túnel de aproximadamente 1 km que en el medio del mismo había una persona tocando un acordeón a piano, sin palabras la verdad maravilloso….

Llegaba la hora de la verdad y de esos tan temidos 30 km que tanto se había hablado durante toda la preparación y las previas, y llego no mas después de un retome por la misma avenida en la cual nos alejábamos del centro de la cuidad.

En mi, comenzó a bajar lentamente mi ritmo hasta un puesto de hidratación creo que en el kilómetro 35 o 36 que cometí el error de caminar para tomar el ultimo gel y agua, después de ahí no pude retomar mi ritmo ni el ritmo de alguna canción ni el ritmo de nada, solo remaba para adelante consumiendo los últimos kilómetros tomando de referencia algún compañero que se divisaba adelante para no aflojar…y como me acordaba de las palabras de Diego por apurar el paso al principio…

Por allá en el 40 mas o menos, una voz veterana que escucho detrás mío de “vamos arriba” totalmente creyendo que el veterano iba en bici anda a saber, por el tono de la voz, para mi sorpresa me paso al costado no como una bicicleta sino como una moto… me dio fuerzas increíbles para terminar o comenzar a finalizar esos 2 o tres kilómetros finales antes de entrar en el tubo humano de los últimos metros……

Que sentí cuando estaba ahí, a unos pasos del ansiado arco de los 42.195…..un sueño, una meta que de verdad la veía lejos de hacer cuando nos contaban la gente de experiencia de esta odisea…..

La verdad un orgasmo de felicidad….

Hasta el IRONMAN no paro le dije a Carlitos y me respondió “aprende a nadar primero Titán”…..

Gracias a todos y en especial por el aguante y la preocupación a Raul siempre firme para con nosotros…..y…..
Mi eterno agradecimiento a mi gran amigo y compañero de esta hazaña “Carlitos Bellomo”

gracias Carlos
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El capi mayor Jorge Alberti no hizo su relato porque según él iba a ser muy largo y aburrido pero nos regala esta filmación donde se hace mención en el relato.